Casi casi estrenando calendario como el año pasado, coincidimos las mismas fechas en Rupit, esta vez para continuar la apertura de la via de escalada (aún no le hemos puesto nombre).
Hace buen tiempo, pero un friooooooo que pela.
Cordada: Nuri, Manel, Esther, y yo
Ya se ha equipado el primer largo. Prueba en artificial Esther, hasta llegar a la primera reunión.
Después de más o menos una horita y media, baja con una carita de satisfación que no veas, porque su trabajillo le ha llevado, ya que, ejem, hay algún parabol a más distancia de la normal.
Después ataco yo, que lío, que si la fifi, que si un estribo, que si el otro, que quita la cinta esprés, madre cuantas cosas, vaya saturación, llego hasta la quinta chapa y para abajo, que tengo el hombro derecho que me duele un poquillo, a saber, alguna bestia que me ha atacado con furia, jiji.
Contenta, porque la concentración y la coordinación en artificial es sublime y un poquillo de práctica no me venia mal, que desde Vilanova de Meià que no hacía.
Manel y Nuri están en el primer largo empezando por arriba, acabando de equipar la vía.
Lo mejor viene en las jornadas gastronómicas, arrocito con verduras que nos prepara el supercocinero Manel y acompañado con su botellita de vino y demás da pie como siempre a las risas inevitables.
Domingo 4-1-09
Me levantan a las 9 h. y viendo como se presenta el día, apetece más un buen desayuno catalán y el calor de la chimenea.
Frío, niebla ...
Finalmente nos decidimos y sobre las 13 h. nos vamos a pie de via.
En principio salimos Manel y yo ya que el resto de mujeres se han quedado en el coche porque el frio y la helada de la mañana aún persiste.
Montamos la reunión para rapelar y colocar la última reunión de la vía, baja Manel, detrás voy yo, no sin antes santigüarme por todos los pecados cometidos, jeje.
Ya a mitad de vía nos quedamos al vacío para preparar la instalación de los parabols.
La verdad que no sé ni como orientar las fotos porque la caída es fuerte, jiji, hay unos cuantos metros hasta el suelo, así que, sin pensar en que posición estamos, ataco con el taladro a la pared.
La verdad que no sé ni como orientar las fotos porque la caída es fuerte, jiji, hay unos cuantos metros hasta el suelo, así que, sin pensar en que posición estamos, ataco con el taladro a la pared.
Esther se decide a montar otro parabol en la vía así que estamos los tres en este trocito de repisa, acabando de montarla.
Preparada para bajar como un xorizo no sin antes un par de gritos, que joe!!! como impresiona el vacío.
Eso sí lo bueno de estar colgados es las vistas panorámicas que tenemos, el pantano de Susqueda, que meses atrás estaba bastante seco.
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